Por Juanjo
El grito irreverente de Jonaz se hizo presente en Sala Estelar
Estamos hartos de la pandemia y asqueados de la cuarentena interminable en la que la naturaleza y las malas decisiones gubernamentales nos tienen sumergidos. Pero como la vida tiene que seguir y no podemos dejar de lado nuestros usos y costumbres, las industrias han reinventando las formas de consumo (base fundamental de la sociedad actual).
Hoy tenemos que digerir la música a través de Live Streaming o conciertos transmitidos en vivo sobre plataformas digitales, una mera ilusión virtual en la que pretendemos estar en un concierto, pero con un hueco, con esa sensación de que hace falta una pieza. Algo similar es lo que sintió Jonáz frente a un set vacío, el cual representó su primera vez tocando en un espacio sin espectadores, “es el ensayo más fresa que hemos tenido”, dijo el intérprete de “Noreste Caliente”.
Sin embargo, debemos reconocer que los músicos siguen explotando su energía a través de sus canciones, buenas ejecuciones, alegría, desfachatez, gritos, brincos y bromas sobre el escenario de Sala Estelar, un concepto impulsado por Apodaca Group, los mismos que se han encargado de ofrecernos los mejores festivales musicales en nuestro país, basta con mencionar al “Pal Norte”.
Jonáz, músico de Monterrey, y que se dio a conocer con la banda de rock Plastilina Mosh durante los 90s, nos muestra la versatilidad de su personalidad a través de su repertorio; con “la nalguita” nos dice lo amable y sexual que puede llegar a ser, lo cual expresa muy bien a través de los arreglos musicales, mismos que convirtieron a este éxito en una versión más bailable e influenciada por el rock, jazz y blues (sin tantos sonidos electrónicos). Esta, es una ventaja que te ofrece el pagar por los espectáculos on-line, pareciera que vemos un tipo de ensayo íntimo, donde se atreven a explorar con más sonidos.
Otras de las canciones que estuvieron en el repertorio fueron “rompecabezas” y “love is a bitch” de los Concord, “Mr. P-Mosh” de Plastilina Mosh y “Picosa”, sencillo lanzado en su carrera de solista con evidentes ritmos cumbieros.
El espectáculo no sólo ofreció a Jonáz en el escenario, también vimos a los músicos que lo acompañan en sus presentaciones y que conforman el proyecto musical A band of bitches.
Una ventaja de este tipo de contenido digital es la interacción inmediata con los músicos, lo que te permite definir el playlist del concierto, expresar tus emociones e ideas (en este caso con Janáz) y que te lea para dar respuesta a tus comentarios (tal como llevamos hoy la nueva interacción social, una vez que me des like o me comentes, tendré la sensación “de que soy parte de tu mundo”).
El juego es divertido, así que pasarás un buen rato. Recomiendo que lo vivas con familia o amigos (conservando aún su sana distancia) y lo acompañes con unas bien frías, la combinación perfecta para generar el ambiente desde la comodidad de tu sala.